Historia
Loncherías “La Playita” nace en 1935 a raíz de que a Don Crescenciano Navarro,
que trabajaba en una fábrica de embutidos , fue despedido. En ese año decidió que con diez hijos que mantener, había que ponerse a trabajar y empezó a elaborar carnes frías en su propia casa, ayudado por su esposa y sus tres hijos mayores. Don Rigoberto Navarro dejó la escuela para ayudar en casa y se encargó en de la fabricación y venta de chorizo, queso de puerco, pierna horneada y jamones diversos.
Tiempo después las carnes frías se empezaron a vender en lonches llegó la estufa de petróleo, por que el gas no llegaba aún a Guadalajara, en ella se freía chorizo y carne adobada, ya se imaginarán el olor que de extendía por los alrededores del portal y que atraía a los clientes. Como también se preparaba pierna al horno, muchos parroquianos pedían que les calentaran sus lonches.
De esta manera nacieron los lonches calientes en Guadalajara, pues a ningún lonchero se le había ocurrido instalar una estufa dentro de su puesto
Hacia 1943, a Don Rigoberto, entonces acuartelado haciendo su servicio militar, se le permitió regresar a encargarse de la familia atendiendo el negocio, por el fallecimiento de su padre.
Y desde entonces hasta ahora, “Loncherías la Playita” sigue siendo un negocio familiar, tradicional tapatío, atendido por la misma familia Navarro.